Un tribunal federal de apelaciones en Estados Unidos rechazó la demanda de un hombre de Florida que intentó recuperar más de $354 millones en Bitcoin, los cuales aseguró haber perdido cuando las autoridades destruyeron un disco duro incautado durante su arresto en 2019 por falsificación e identidad robada.
La decisión, emitida este martes por el Tribunal de Apelaciones del Undécimo Circuito, confirmó la sentencia de una corte inferior que negó la moción de Michael Prime, quien buscaba la devolución de sus supuestos activos digitales.
Los jueces señalaron que Prime esperó demasiado tiempo para reclamar el dispositivo y que su retraso impidió al gobierno devolver el disco duro destruido.
1. El hombre que dijo haber perdido miles de Bitcoin
Michael Prime fue arrestado en 2019 por delitos de falsificación, robo de identidad y posesión ilegal de armas. En 2020 fue condenado a más de cinco años de prisión. Durante su juicio, negó en repetidas ocasiones tener criptomonedas o grandes cantidades de dinero digital.
Sin embargo, años después de cumplir su condena, Prime cambió su versión. Afirmó ser “un magnate del Bitcoin”, asegurando que el disco duro destruido contenía las claves privadas de acceso a 3,443 BTC, equivalentes a más de $354 millones de dólares según el valor actual del mercado.
El tribunal no aceptó el argumento. Según los jueces, Prime contradijo sus propias declaraciones ante investigadores, oficiales de libertad condicional y el juez que dictó su sentencia.
“Durante años negó tener Bitcoin alguno. Solo después de su liberación empezó a presentarse como un millonario en criptomonedas”, escribieron los jueces en su resolución.
2. Por qué el tribunal rechazó la apelación
Prime interpuso una moción bajo la Regla 41(g), que permite solicitar la devolución de bienes confiscados al concluir un caso penal. Pero en 2024, un tribunal federal determinó que el gobierno había “destruido adecuadamente” los dispositivos incautados y que la solicitud se presentó demasiado tarde.
El tribunal de apelaciones coincidió con esa decisión. En su fallo, los jueces señalaron que el “retraso inexcusable” de Prime perjudicó al gobierno, y que incluso si los Bitcoins existieran, sería “inequitativo” compensarlo por la pérdida.
La corte también observó que los agentes federales, confiando en las primeras declaraciones de Prime, terminaron la búsqueda de criptomonedas y destruyeron los dispositivos, incluyendo el disco duro naranja que supuestamente guardaba las claves de acceso.
3. Cómo se pierde realmente un Bitcoin
A diferencia del dinero físico, el Bitcoin no se almacena en un disco duro. Lo que se guarda son los archivos o claves privadas que permiten acceder a una cartera digital.
Cuando esas claves se pierden o destruyen, los Bitcoin no desaparecen del sistema, pero quedan bloqueados para siempre, sin posibilidad de ser usados o transferidos.
Como explicó Satoshi Nakamoto, el creador anónimo de Bitcoin, en 2010:
“Las monedas perdidas solo hacen que las monedas de los demás valgan un poco más. Piénsalo como una donación a todos.”
El caso de Prime reabre el debate sobre la pérdida irrecuperable de activos digitales y la necesidad de una educación más sólida sobre seguridad en criptomonedas.
4. Cuántos Bitcoin están realmente perdidos
Un informe publicado en 2025 por River Financial, institución especializada en Bitcoin, estima que entre 2.3 y 4 millones de BTC —equivalentes al 11% y 18% del suministro total— se han perdido de forma permanente.
Cerca de 3.8 millones de BTC pertenecen a carteras que no han registrado movimiento alguno durante más de una década. Dado que solo existen 21 millones de Bitcoin posibles, la oferta efectiva en circulación se calcula entre 15.8 y 17.5 millones de BTC.
Esto significa que una parte significativa de toda la riqueza en Bitcoin jamás podrá ser recuperada, un fenómeno que, paradójicamente, incrementa el valor del resto de las monedas.
5. Implicaciones legales y tecnológicas del caso
El fallo contra Prime refuerza una realidad que muchos usuarios olvidan: la ley no protege errores personales en la custodia de criptomonedas. Una vez destruidas las claves, ningún tribunal puede restaurar el acceso a esos fondos.
El caso también plantea una pregunta compleja sobre la relación entre propiedad digital y responsabilidad individual. Si bien las criptomonedas ofrecen independencia frente a bancos o gobiernos, esa libertad implica mayores riesgos y obligaciones personales.
En palabras de analistas legales, el caso Prime “podría servir como advertencia” a nuevos inversionistas sobre la importancia de almacenar correctamente sus claves privadas y mantener un registro seguro de sus activos digitales.
6. Opinión: una lección sobre control y confianza
Más allá del drama legal, este caso simboliza el dilema central de las criptomonedas: la promesa de autonomía financiera con el costo de la responsabilidad absoluta.
El Bitcoin fue diseñado como un sistema sin intermediarios, donde cada usuario actúa como su propio banco. Pero esa independencia tiene consecuencias. La pérdida de una clave privada no solo es irreversible: representa una pérdida definitiva de riqueza.
Para muchos expertos, el fallo también refleja la madurez del sistema judicial estadounidense al reconocer los límites técnicos y legales de los activos digitales.
El mensaje es claro: la tecnología puede ofrecer libertad, pero no sustituye la prudencia ni la transparencia.
Conclusión y reflexión final
La historia de Michael Prime no solo ilustra los riesgos de descuidar la seguridad de los activos digitales, sino también los límites de la justicia cuando se trata de tecnología descentralizada.
A medida que el valor de Bitcoin y otras criptomonedas crece, los casos de pérdida de fondos, acceso olvidado o errores humanos seguirán aumentando.
El aprendizaje más importante es simple: la soberanía financiera requiere educación, disciplina y responsabilidad personal.
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